La caída de Web3 y el surgimiento del Internet 3D

Web3's fall and the rise of 3D Internet

Una invención tiene que tener sentido en el mundo en el que termina, no en el mundo en el que comenzó. – Tim O’Reilly

Cuando surgió el término “Web3”, se anunció como la próxima evolución de Internet. La definición oficial de Web3 describe la siguiente evolución de la World Wide Web, la interfaz de usuario que brinda acceso a documentos, aplicaciones y multimedia en Internet. Este es efectivamente un espacio donde las plataformas y servicios descentralizados ofrecen a las personas un mayor control, propiedad y transparencia. Al menos, eso es lo que se espera. Pero como sabemos, la esperanza no es una estrategia y se necesita un plan para lograr la adopción masiva; eso se logra mediante la participación.

Como ocurre con cualquier tecnología emergente, la emoción a menudo estaba envuelta en términos de moda: NFT, Crypto, DeFi y más. Para muchos, estos términos se convirtieron en obstáculos en lugar de puertas de entrada para la comprensión. Hoy, a medida que el panorama evoluciona, vale la pena señalar que “Web3” – como término – está en declive, dando paso a “Internet 3D”. Pero, ¿por qué el cambio? ¿Y cómo podemos desmitificar la próxima fase de la evolución en línea?

Términos de moda: Nublando la visión

Al mundo de la tecnología le encantan sus jergas. Cuando surge un concepto novedoso, a menudo se acompaña de un nuevo vocabulario, lo cual puede ser una espada de doble filo. A veces, imagino a un colectivo, en lo más profundo de la Tierra, diciendo: “¿Qué podemos hacer para que esta tecnología mística sea de la que la gente quiera hablar en cada evento social?”

Por un lado, estos términos encapsulan ideas complejas, lo que las hace comprensibles para aquellos que conocen el tema. Pero para la población en general, pueden oscurecer el valor real y el potencial de la tecnología.

Los NFT, o tokens no fungibles, son un ejemplo perfecto. Mientras que la comunidad tecnológica los veía como una forma revolucionaria de verificar la singularidad y la propiedad en el ámbito digital, muchos fuera de este círculo se quedaron rascándose la cabeza. “¿Por qué pagar miles por una imagen digital que puedo capturar en una captura de pantalla?” era un sentimiento común. Y ¿por qué los NFT están limitados al mundo del arte? Sin embargo, eso no es realmente cierto, pero uno nunca lo sabría.

El problema de la percepción

La desconexión no se debe solo al desconocimiento de los términos, sino a la falta de claridad sobre los problemas del mundo real que estas tecnologías pretenden resolver. Toda innovación significativa surge de un problema que encuentra su solución. La computadora personal, por ejemplo, no era solo un dispositivo elegante, sino una solución para las necesidades de cómputo individuales. El teléfono móvil no era solo un teléfono portátil, sino que resolvía el problema de comunicación sobre la marcha. Esto se remonta a la invención de la rueda, de ahí que digamos “la mejor invención desde la rueda”.

En la nebulosa de la jerga de “Web3”, a menudo se pasaban por alto los problemas subyacentes que se estaban abordando y las soluciones revolucionarias que se estaban ofreciendo. En lugar de resaltar el valor de las finanzas descentralizadas (DeFi) en democratizar las finanzas o el papel de los NFT en la revolución de la propiedad de contenido, las discusiones a menudo derivaban en debates abstractos que alejaban al usuario común de las innovaciones centrales.

Ingresa el “Internet 3D”

Ha habido un movimiento consciente hacia terminología más intuitiva para reconocer estas barreras. “Internet 3D” elimina la naturaleza críptica de “Web3” y pinta una imagen vívida. Sugiere un espacio inmersivo, expansivo y multidimensional, conceptos mucho más accesibles para muchos.

Pero no se trata solo de cambiar la marca. Se trata de remodelar la conversación para centrarse en los impactos tangibles de estas innovaciones en la vida diaria. En lugar de resaltar las complejidades de la cadena de bloques, las discusiones se inclinan más hacia sus aplicaciones: sistemas de votación descentralizados, cadenas de suministro transparentes y mercados entre pares que empoderan a las personas.

Como señaló recientemente el empresario y ejecutivo de LandVault, John Kraski, una de las principales voces en LinkedIn: “El término web3 está muerto”. También señaló lo que piensan las marcas, donde se encuentra la aceptación, el Santo Grial de las ventas, y según John, “piensan que es Fortnite y Roblox”.

John también mencionó: “A los clientes francamente no les importa (la terminología). La tecnología subyacente sigue siendo sólida”. Su consejo es simple: “Encuentra un problema que necesite ser resuelto. Construye una solución aprovechando la tecnología”. Como ocurre con la mayoría de sus publicaciones, termina con “gracias más tarde”. Presta atención. Este me ha tocado la fibra.

Poniendo la sustancia al frente

Debemos cambiar nuestro enfoque de la jerga a los recorridos para cerrar la brecha entre la innovación y la comprensión. Ha llegado el momento de destacar historias reales. Un artista digital que obtiene la propiedad legítima y una compensación justa a través de los NFT o un agricultor en un país en desarrollo que accede a mercados globales gracias a plataformas descentralizadas son casos de uso reales que resuelven problemas.

Las personas que impulsan estas ideas, desde los desarrolladores hasta los usuarios finales, son la fuerza impulsora. Los clientes, que son el mercado final, deben requerir los productos o servicios. Sus problemas, soluciones e historias son la esencia de esta nueva era y merecen estar en el centro de atención.

Conclusión

A medida que nos adentramos en la era del “Internet 3D”, es crucial recordar que nuestro papel no es solo innovar, sino también educar. Al deshacernos de las capas de terminología confusa y poner énfasis en aplicaciones y historias del mundo real, podemos asegurarnos de que el futuro de Internet no solo sea revolucionario, sino también inclusivo y comprensible para todos.

Publicado primero en Grit Daily. Leer aquí.

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